A pesar de que desde Ucrania aseguran que todavía mantienen bajo su control algunas partes de Bakhmut, son muchas las fuentes que consideran que esta ciudad ha sido efectivamente tomada por los hombres de Wagner, tras meses de combates y miles de muertos. Si bien su posesión permite a Rusia sobre el papel contar con una base de partida para futuras ofensivas en dirección al río Donets, lo cierto es que la toma ha sido tan lenta que Ucrania ha podido preparar nuevas posiciones defensivas a voluntad. Ni siquiera el efecto mediático de la conquista es el que Rusia hubiese deseado. Queda pues por saber si el esfuerzo invertido, medido en vidas y valiosos recursos, ha servido o no al propósito de desgastar a Ucrania, haciendo inviable una ofensiva exitosa, mientras Zelenski continúa buscando más apoyo entre las naciones del G7.
Yevgueni Prigozhin, el fundador de Wagner Group, ha reclamado hoy la conquista de Bakhmut, asegurando que la localidad, en la que rusos y ucranianos llevan meses combatiendo por cada palmo de terreno y cada edificio, ha sido tomada en su totalidad. Según el propio Prigozhin –quien ha vuelto a cargar contra el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú y contra el Jefe de Estado Mayor, Valery Guerásimov– la batalla habría durado 224 días, en los que su organización se habría dejado varios miles de mercenarios, sin que se conozca la cifra exacta de pérdidas de unos y otros, alta en cualquier caso.
Desde Ucrania, por su parte, aseguran que todavía hay partes de esta ciudad bajo su control, aunque también admiten que la situación es «crítica», en palabras de Hanna Maliar, la viceministra de Defensa del país. Por otra parte, en los últimos días han venido, tal y como hemos contado, revirtiendo parte de los avances rusos a norte y sur de Bakhmut, lo que hace que la situación no sea tan evidente como la llegada de las tropas de Wagner a los últimos edificios de la «ciudadela» hace pensar.
Más bien, lo que vemos –un año después, por cierto, de la caída de Mariúpol que Rusia celebra hoy publicando imágenes de algunos de los poquísimos edificios reconstruidos desde entonces-, es cómo el frente se está corrigiendo –lo que también podría ser una oportunidad para Ucrania en el futuro-, limándose algunos de los salientes que se habían ido creando según las tropas rusas y los elementos de Wagner intentaban avanzar a norte y sur de la ciudad, en dirección a Orikhovo-Vasylivka , Hryhorivka, Chasiv Yar, Stupochky o Predchetyne. La importancia de la pérdida de la ciudad es ya, en cualquier caso, prácticamente nula. Hasta el punto de que ni siquiera en los medios rusos de referencia ha sido noticia, eclipsada totalmente por las informaciones relativas al envío de F-16 a Ucrania.
Las razones son varias. Desde el punto de vista simbólico, llega tarde y a un precio excesivo como para que Rusia tenga nada que celebrar. Desde el militar, simplemente ha pasado tanto tiempo desde el comienzo de los combates en esta ciudad, que Ucrania ha tenido la oportunidad de construir un buen número de posiciones defensivas en las alturas al oeste de la localidad, lo que hará casi imposible que Rusia saque, al menos a corto plazo, partido de su captura, asumiendo una postura defensiva en lugar de proyectarse al norte, hacia el río Donetsk, o hacia el oeste, en dirección a las ciudades de Sloviansk y Kramatorsk que eran, no lo olvidemos, el gran objetivo ruso meses atrás. Y eso suponiendo que no cambien las tornas y sea Ucrania la que recupere el impulso en este área, como ya plantean algunas fuentes.
En cualquier caso, se abre una nueva etapa de la guerra, pues tras la caída de Bakhmut quedan por resolver varias cuestiones. En primer lugar, cuál será el papel de Wagner Group de aquí en adelante. Recordemos que el propio Prigozhin se ha convertido en un importante quebradero de cabeza para la cúpula del Ministerio de Defensa ruso, que la organización que dirige ha sufrido un gran desgaste en todos los sentidos y que tiene muchos motivos para volver a centrarse en África, en donde no solo hay trabajo de sobra, sino también un menor riesgo y un lucrativo negocio.
Además, no se trata de unidades concebidas para la defensiva, sino que donde realmente demuestran su valía es en las operaciones ofensivas, en las que actuando en pequeños grupos con un importantísimo apoyo artillero -hay quien habla de un consumo de munición tres veces mayor que el del Ejército ruso en algunos casos, de ahí parte de los roces con el Ministerio– y asumiendo grandes bajas, logran superar posiciones que a los uniformados rusos les resultaría imposible doblegar.
En segundo lugar, cuál de los dos bandos ha resultado más dañado por la decisión ucraniana de resistir a ultranza en la ciudad, algo que además de la pérdida de muchas vidas, ha implicado un gran consumo de suministros. Ucrania, como sabemos, ha venido en paralelo constituyendo nuevas unidades formadas con el personal entrenado en Occidente y con el material enviado por sus socios, incluyendo cientos de blindados de distintos tipos, así como decenas de carros ligeros AMX-10RC y carros de combate Leopard 2A4/2A6, Challenger 2 y Leopard 1A5, a la espera de la llegada de los Abrams estadounidenses.
Sin embargo, y en honor a la verdad, es muy difícil todavía evaluar hasta qué punto la necesidad de desviar hombres y municiones a Bakhmut ha podido jugar en contra de este esfuerzo -o a favor, al concentrar en solo punto todo el afán ruso-, contribuyendo a retrasar la ofensiva y, por la misma razón, ofreciendo tiempo a Rusia para reforzar sus defensas. Un debate que ha generado agrias polémicas en redes y que, en última instancia, seguirá mucho tiempo sin resolverse dada la falta de datos mensurables, con opiniones totalmente enfrentadas entre quienes piensan que ha servido al objetivo de desgastar a Rusia -incluso entre los propios rusos– y quienes sostienen exactamente todo lo contrario.
De hecho, será sumamente interesante estudiar en el futuro el impacto de esta batalla y del paso a una guerra de desgaste en general e intentar dilucidar, según vayan apareciendo papers y documentos, si fue Ucrania al laminar a Wagner, desgastar a Rusia y preparar con relativa seguridad su ofensiva la que se llevó dicho vulgarmente, el gato al agua. Lo contrario implicaría que ha sido Rusia la que ha podido reconstituir su Ejército a la vez que llevaba a cabo su campaña de ataques estratégicos mediante misiles y drones y a la par que construía posiciones defensivas, asegurando el territorio tomado hasta entonces.
Respecto a la ofensiva ucraniana, sigue sin haber -no podía ser de otra manera-, una fecha, mientras las primavera se consume. El cambio que puede suponer la llegada de F-16 al país, por más que no se materialice hasta otoño-invierno, es suficiente como para alterar todos los cálculos y retrasar los planes de ambos Estados Mayores, mientras Rusia continúa con sus avisos a Occidente, que muy pocos toman ya en serio.
Pasando a la situación en el frente, en las últimas horas se ha producido un nuevo ataque ruso con drones, la mayor parte de ellos dirigidos contra la región de Kiev, en donde se concentran algunos de los sistemas antiaéreos más capaces enviados a Ucrania, y logrando algunos impactos. Al respecto, pues Rusia está intentando por todos los medios erosionar esta red antiaérea, se ha publicado recientemente que Rusia está haciendo lo posible por aumentar la producción de misiles hipersónicos Kinzhal, contando ahora con capacidad para fabricar hasta 53 de ellos al mes.
Además de esto, hoy se ha combatido al norte en dirección a Bilohorivka, sin cambios, como tampoco los ha habido salvo mínimos en los últimos meses ni allí, ni más al norte, en el área de Kreminna, a pesar de los denodados intentos rusos desde el comienzo de su ofensiva invernal.
En torno a Bakhmut, entre ataques con municiones incendiarias e intensos bombardeos, se están produciendo los combates por las últimas edificaciones al suroeste de la ciudad. Según algunas fuentes, los ucranianos se estarían retirando hacia posiciones defensivas en torno a Ivanivske, así como, en general, hacia las alturas al oeste de la ciudad. También se ha luchado en dirección a Bila Hora.
En el área al oeste de la ciudad de Donetsk, los combates han vuelto a afectar principalmente a las inmediaciones de la ciudad de Avdiívka. Allí se han registrado enfrentamientos hacia Novokalynove y Stepove al noroeste, así como en dirección al centro de la localidad y también en la zona de Permovais’ke y Pisky. Más al sur, los combates han proseguido en Mariínka y Novomykhailivka.
Por último, se han registrado explosiones en Tokmak, en lo que sería un nuevo ataque ucraniano, a la vez que se han confirmado por satélite los resultados de ataques anteriores, en este caso sobre Mariúpol.
Contexto internacional, diplomacia y sanciones
Como no podía ser de otro modo, las miradas han vuelto a estar puestas en Hiroshima, donde continúa la Cumbre del G7 y donde hoy ha sido recibido el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Antes de entrar de lleno en la actividad diplomática del presidente Zelenski en Hiroshima es importante señalar otra cuestión. Los líderes del G7, a falta de la última jornada de la Cumbre que tendrá lugar mañana y tras la Declaración conjunta de ayer, han pedido a China que “presione a Rusia para que cese su agresión militar y retire de inmediato, completa e incondicionalmente sus tropas de Ucrania”. En este sentido, han animado a China a que apoye una paz integral, justa y duradera basada en la integridad territorial. Al mismo tiempo, han afirmado que quieren mantener relaciones “constructivas y estables” con Pekín, subrayando la importancia del “diálogo franco”, pero también han reafirmado su “oposición” a cualquier “militarización” china en Asia-Pacífico.
Al respecto, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha declarado:
“El objetivo se ha anunciado en voz alta y con franqueza, que es derrotar a Rusia en el campo de batalla, y sin detenerse en eso, eliminarla después como rival geopolítico, por así decirlo, que junto con cualquier otro país que reclame un lugar independiente en el mundo, serán suprimidos como oponentes”.
Asimismo, hay que tener en cuenta que la semana que viene se espera que el enviado especial de China para asuntos euroasiáticos, Li Hui, viaje hasta Moscú tras haber pasado por Kiev. Se espera igualmente que también se desplace hasta Berlín, París y Varsovia para tratar de resolver el conflicto entre Ucrania y Rusia.
Entramos ahora sí en los encuentros del líder ucraniano con los dirigentes del G7 en Japón que ha definido del siguiente modo:
“Japón. G7. Reuniones importantes con socios y amigos de Ucrania. Seguridad y mayor cooperación para nuestra victoria. La paz estará más cerca hoy.”
En los encuentros bilaterales que ha mantenido, Zelenski también ha tratado de coordinar su posición con la del resto de líderes en vísperas de su participación mañana en la Cumbre. Un primer día en Hiroshima que el líder ucraniano ha definido como “muy poderoso”, anticipando que mañana lo será aún más.
Sí conviene señalar que aún no se ha producido el encuentro entre Zelenski y el presidente estadounidense Joe Biden, importante además porque se espera que Washington anuncie un nuevo paquete de ayuda militar de 375 millones de dólares tras la reunión. Se espera que este nuevo paquete incluya armamento que Estados Unidos y también otros aliados de Ucrania ya han venido suministrando como proyectiles de artillería, vehículos blindados y armas contracarro.
Comenzando por la primera de las reuniones, con la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, la conversación ha girado en torno al apoyo político y de defensa de Roma a Kiev, y a los primeros resultados de su reciente visita al país. Asimismo, Zelenski y Meloni han discutidos sobre la necesidad de mejorar las capacidades de defensa aérea ucranianas, incluido el entrenamiento de sus pilotos.
De otro lado, con el canciller Olaf Scholz, Zelenski ha discutido también sobre los primeros resultados de su visita a Berlín, así como de la importancia de la implementación de la Fórmula de Paz. Sobre esta última cuestión también ha incidido el presidente Zelenski en su encuentro con su homólogo francés, Emmanuel Macron. Se ha enfatizado que el hecho de que Francia apoye la coalición de aviones de combate y participe en el entrenamiento de los pilotos ucranianos es importante. A diferencia de lo que se ha comunicado del resto de reuniones, Zelenski ha informado a Macron sobre su participación en la Cumbre de la Liga Árabe ayer.
Zelenski también se ha reunido con el premier británico al margen de la Cumbre y han discutido sobre la implementación adicional de los acuerdos alcanzados durante la visita del dirigente ucraniano a Londres el 14 de mayo, así como el desarrollo de sus relaciones bilaterales. Por supuesto, el Zelenski le ha agradecido a Sunak el liderazgo de Reino Unido en la creación de la coalición internacional de aviones de combate.
Por otra parte, y mientras el ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, celebraba la creación de la coalición internacional para el entrenamiento de los pilotos ucranianos en el manejo de los aviones de combate F-16, en Rusia también han comenzado a hacer comentarios sobre el asunto.
Ha sido en concreto el viceministro de Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, quien ha subrayado que los países occidentales continúan por el camino de la escala, “lo que conlleva enormes riesgos para ellos”, y que Moscú tendrá en cuenta en sus planes el envío de F-16 a Ucrania -aunque aún no se ha dado este paso-, y afirma que cuentan con todos los medios necesarios para lograr sus objetivos.
En respuesta, el asesor de la presidencia de Ucrania, Mikhailo Podolyak, deduce de las declaraciones del anterior que Rusia teme la “consolidación de aliados pro-ucranianos”, a la defensa antimisiles de alta calidad, y a la contraofensiva.
Volviendo sobre la Cumbre, en Hiroshima también se encontraban la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Sin embargo, solo este último ha participado en un encuentro bilateral con el presidente Zelenski. Más allá de discutir sobre la Fórmula de Paz y vías concretas para consolidar el apoyo mundial a la iniciativa de paz, Zelenski y Michel han conversado sobre el curso de la implementación de las recomendaciones de la Comisión Europea para abrir las negociaciones de adhesión a la UE. Asimismo, han prestado especial atención a las restricciones a la exportación de productos agrícolas ucranianos por parte de algunos Estados miembros de la UE y la inadmisibilidad de su extensión después del 5 de junio. Esto último se debe precisamente a que los países involucrados ya llegaron a un acuerdo con la Comisión Europea tras haberle hecho llegar una queja formal de que el volumen de productos ucranianos que había accedido a sus respectivos territorios estaba afectando al mercado agrícola local.
El presidente Zelenski también se ha reunido con el primer ministro indio, Narendra Modi, uno de los invitados a la Cumbre. Le ha informado en detalle sobre la Fórmula de Paz y ha extendido la invitación para que India se una a la implementación. De igual modo, Zelenski ha puesto de manifiesto las necesidades de Ucrania en lo que concierne a desminado humanitario y hospitales móviles. El presidente ucraniano también ha aprovechado la ocasión para agradecerle a Modi que India haya apoyado la integridad territorial y la soberanía de Ucrania y, en particular, en el marco de organizaciones internacionales como Naciones Unidas, así como por brindarles ayuda humanitaria.
Pasando a otros temas, la Corte Penal Internacional (CPI) ha emitido un comunicado en el que se califican de inaceptables las medidas adoptadas por Rusia contra funcionarios del tribunal. En concreto, Moscú anunció ayer una nueva ampliación de su lista negra de individuos sancionados incluyendo al fiscal de la CPI, Karin Khan, a los jueces de la Sala Preliminar II, así como a otros funcionarios. En el comunicado, la Corte se ha mostrado tajante: “No se disuadirá a la Corte de ejercer su mandato legítimo de asegurar la rendición de cuentas por los crímenes más graves de trascendencia para la comunidad internacional en su conjunto”. Cabe recordar una vez más que hay en vigor una orden de arresto contra el presidente ruso Vladímir Putin y la Comisionada para los Derechos del Niño en Rusia, Maria Lvova-Belova emitida por la CPI por su participación en las deportaciones forzosas de niños ucranianos a Rusia.
De igual modo, la CPI ha hecho un llamamiento a los Estados parte y a las partes interesadas en el Estatuto de Roma para que redoblen sus esfuerzos para proteger a la Corte, sus funcionarios y personal, y garantizar que pueda seguir cumpliendo su mandato independiente”.
Para concluir, no dejan de ser interesante las recientes declaraciones del Ministerio de Defensa de Austria, pues consideran que la participación inmediata en el desminado de Ucrania viola su neutralidad constitucional. En este sentido, la ministra Klaudia Tanner, ha sostenido que Austria no ha cambiado de opinión sobre su posible involucración en estas tareas dado que “actualmente es imposible distinguir entre la remoción de minas humanitaria y militar”. De otro lado, también Tanner también ha señalado que sus equipos de remoción de minas se encuentran desplegados en Balcanes Occidentales y que las autoridades austríacas apoyarán financieramente la operación de desminado humanitario de Ucrania a nivel de la UE. Por tanto, según esta postura la ayuda para el desminado de Ucrania debe brindarse solo cuando acabe la guerra, ya que “el desminado en tiempos de guerra va en contra del derecho constitucional”.
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