Un ataque ruso con misiles ha dejado media decena de fallecidos en la localidad de Krivói Rog, en una jornada en la que hemos podido ver la primera imagen del resultado del intento ucraniano de ayer sobre el puente de Chonhar, que une la península de Crimea con la ucrania continental. La noticia del día no viene sin embargo de Kiev o Moscú, sino de Pekín, pues según se ha publicado, el régimen comunista ha implementado controles temporales a la exportación de varios tipos de UAVs, en una acción dirigida específicamente contra Ucrania.
Si en el informe de ayer hablábamos de los últimos ataques ucranianos sobre Moscú y otras localidades rusas como Taganrog, buscando el golpe propagandístico, la aprobación por parte de China de una serie de controles a la exportación de drones podría dificultar su reedición, aunque las consecuencias de la medida podrían ser, a tenor del texto, más amplias. La medida, que entrará en vigor mañana, permitirá al gobierno comunista vetar la exportación durante los próximos dos años, de determinados tipos de UAV, a saber:
- Aquellos capaces de volar más allá del rango visual del operador, con un tiempo de vuelo máximo de al menos 30 minutos, y un peso máximo de despegue de más de 7 kg o un peso en vacío de más de 4 kg.
- Aquellos equipados con uno o varios de los siguientes elementos:
- Un radio a bordo que exceda los límites de potencia aprobados para productos de radio civiles internacionales.
- Capacidad para transportar cargas con la función de lanzamiento, o un lanzador integrado.
- Transporte una cámara de alta gama o una cámara multiespectral que soporta longitudes de onda fuera de 560nm, 650nm, 730nm, 860nm.
- Transporta una cámara infrarroja con una diferencia de temperatura de ruido equivalente (NETD) inferior a 40 mK.
- Equipado con un módulo de posicionamiento por medición de distancia láser que cumple con ciertos requisitos.
- Capaz de soportar cargas no certificadas.
La medida, como se puede suponer, afecta a modelos de grandes dimensiones como los Mugin-5 –empleados en algunos de los ataques ucranianos a larga distancia-, pero no solo. De hecho, los modelos de mayor tamaño de la conocida firma DJI, como los Matrice 600 se verían también afectados. Lo que es peor para los intereses de los dos bandos enfrentados en Ucrania (pero especialmente para este último país), como se recoge en el último punto, todos aquellos aparatos que puedan transportar cargas «no certificadas» (o «autorizadas», dependiendo de la traducción) se verían afectados.
Como decimos, la medida afectará especialmente a Ucrania pues, como hemos ido viendo, Rusia cuenta con el apoyo de una China que si bien no participa directamente en la guerra, está permitiendo que Moscú pueda sortear los bloqueos y sanciones internacionales por ejemplo accediendo a productos de alta tecnología, que de otra forma sería imposible de adquirir para el país. Es decir, que no parece probable que las restricciones vayan a aplicarse a ambos contendientes por igual, siendo de hecho una acción encaminada a igualar la contienda en un aspecto en el que Ucrania había destacado, aunque Rusia ha venido haciendo notables progresos. Así, las restricciones chinas están pensadas para evitar que Ucrania lleve la guerra al interior de Rusia en primer término, pero también para dificultar el uso por parte de dicho país de drones comerciales letalizados, que tanta difusión han tenido en este año largo de guerra.
Claro está, que China pueda influir en el acceso a Ucrania de determinados productos no implica que este país pierda automáticamente la posibilidad de hacerse con los mismos o, en su caso, con los componentes constitutivos. De hecho, si algo ha demostrado la guerra, es que hay numerosas formas de sortear las sanciones y los vetos a la exportación, algo que Rusia ha hecho con suma maestría y que sin duda Ucrania podrá hacer en los próximos meses. Así, por ejemplo, este país podría:
- Recurrir a terceros países, pues resulta dudoso, ya que las restricciones serán discrecionales, que todos los Estados se vean afectados por las mismas.
- Buscar los productos en el mercado negro o en mercados paralelos como puede ser incluso el de segunda mano, aunque este es un mercado sin duda tensado tras meses y meses de donaciones a Ucrania y adquisiciones vía crowdfunding.
- Optar por otros proveedores, aunque el «monopolio» de empresas chinas como DJI es en algunos segmentos, como el de los drones mini, bastante acusado. Aun así hay opciones como la francesa Parrot que podrían cubrir parte de las necesidades ucranianas.
- Seguir diseñando y produciendo drones propios en base a componentes foráneos, incluso aunque sean chinos. Al fin y al cabo, las restricciones no parecen afectar a estos últimos, sino a los productos completos.
Volviendo sobre la posición de China, recordemos que al gigante asiático si bien la guerra en sí no parece ser el escenario que más le agrade, se ve en la tesitura de no poder dejar caer a Moscú, ante el riesgo de quedarse sola frente a Occidente como única gran potencia revisionista. En este sentido, la medida aprobada hoy tendría también como objetivo aumentar la presión de cara a sentar a Ucrania en la mesa de negociaciones, al limitar sus posibilidades en el campo de batalla.
Sobre el terreno, hoy cabe destacar el impacto de un misil ruso sobre un edificio residencial en la localidad ucrainana de Krivói Rog (sobre estas líneas), que ha dejado por el momento media decena de fallecidos y decenas de heridos. No obstante, no ha sido ni mucho menos el único punto alcanzado por las armas del contrario. Así, la ciudad de Donetsk ha sufrido un bombardeo ucraniano que se ha saldado con la destrucción de varios vehículos y también se han registrado varias explosiones en la localidad crimeana de Simferopol sin que hayan trascendido los resultados.
Por otra parte, después de que ayer desde fuentes ucranianas se hablase de un ataque sobre el puente de Chonhar, que une Crimea con la Ucrania continental, ha circulado por las redes sociales la imagen que probaría lo ocurrido, aunque con una calidad bastante baja que ha hecho a muchos dudar de su autenticidad, aunque al parecer las imágenes por satélite darían cuenta de su veracidad. En cualquier caso, un golpe considerable a la logística rusa, por más que pueda ser reparable, ya que al menos durante unas semanas la circulación de ferrocarriles quedará cortada.
Hablando de puentes, y como curiosidad, Rusia ha aumentado la protección en torno al puente de Crimea, al que se ha dotado de nuevas redes antisabotaje, pensadas para impedir el paso de los vehículos tanto submarinos como de superficie no tripulados, como los que llevaron a cabo el último ataque sobre esta infraestructura. Un tipo de protecciones que también se han instalado en la base naval de Sebastopol, como es lógico.
Respecto a los combates, ha sido una jornada con escasas novedades al menos en cuanto a movimientos. Al norte de la línea de frente, no ha trascendido nada nuevo en las últimas horas, después de que las tropas rusas tuviesen que retirarse de parte del terreno ocupado en los días previos.
En el área de Bakhmut continúan los combates, tanto por parte de la infantería, como de la artillería o mediante el empleo de drones. No hay sin embargo novedades relativas a nuevos cambios de posición, como tampoco al oeste de Donetsk.
Al sur del país, mientras las AFU intentan romper el sistema defensivo más complejo que se ha conocido según algunos desde hace ocho décadas, desde fuentes rusas continúan asegurando haber expulsado a estas de Staromaiorske, extremo que ni mucho menos se ha confirmado. Por su parte, en el eje de Orijiv los ucranianos habrían seguido avanzando hacia Robotyne por el norte, a la vez que consolidando las posiciones ganadas en los días previos, especialmente al este, y recuperando el material dañado en los combates.
Contexto internacional, diplomacia y sanciones
Comienza una nueva semana y si bien el inicio no ha sido especialmente ajetreado a nivel internacional, lo cierto es que hay que destacar la visita del ministro de Exteriores de Croacia a Ucrania así como las declaraciones de la Comisionada para los Derechos del Niño en Rusia, Maria Lvova-Belova.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, ha recibido a su contraparte croata, Gordan Grlić Radman. Lo más destacable de su encuentro es precisamente que ambas partes han acordado que Ucrania pueda usar los puertos croatas en el río Danubio y el mar Adriático para exportar sus productos agrícolas. Según Kuleba:
“Ahora trabajaremos en la planificación de las rutas más eficientes a estos puertos y aprovecharemos al máximo esta oportunidad. Cada contribución para desbloquear las exportaciones, cada puerta abierta es un aporte real y efectivo para la seguridad alimentaria mundial”.
Por otro lado, el representante croata ha sido recibido por la viceprimera ministra para la Integración Europea y Euroatlántica de Ucrania, Olga Stefanishyna, a quien le ha trasladado que Zagreb está dispuesta a seguir compartiendo experiencias en el proceso de integración en la UE y ha felicitado a Ucrania por los esfuerzos que ha realizado en estas circunstancias extremadamente difíciles. Además, sobre estas cuestiones, así como sobre la implementación de la Fórmula de Paz ha discutido también con el presidente de la Verkhovna Rada (Parlamento ucraniano), Ruslan Stefanchuk. En relación con este último tema es interesante destacar que Croacia está dispuesta a participar en la implementación de los puntos de la Fórmula relacionados con la seguridad alimentaria y energética, el restablecimiento del respeto por la Carta de las Naciones Unidas y la integridad territorial de Ucrania, lograr justicia por los crímenes de Rusia y prevenir el ecocidio. Además, en Zagreb en octubre albergarán la Conferencia Internacional de Donantes sobre Acción contra las Minas en Ucranias.
Otro resultado de la visita del representante croata ha sido precisamente la firma de un acuerdo de cooperación con el Programa Mundial de Alimentos en Kiev para colaborar en las tareas de desminado en Ucrania. Ha sido el propio Grlić quien ha señalado que Croacia cuenta con uno de los sistemas de acción contra minas más avanzados del mundo y que esto es precisamente “una condición previa para reiniciar las actividades económicas y sociales, especialmente la producción agrícola”.
Por otro lado, en el comunicado oficial de la reunión entre los ministros de Exteriores de Ucrania y Croacia reza que otro de los temas principales objeto de la discusión ha sido el de la ayuda militar. Así, y pese a no ofrecer detalles, el ministro Kuleba ha enfatizado que hay “acuerdos concretos que pronto se implementarán” y que la ayuda brindada por Croacia es muy sólida teniendo en cuenta su presupuesto dedicado a Defensa.
Siguiendo con este tema, el Ministerio de Defensa de Ucrania y la empresa turca Baykar han firmado hoy el contrato que prevé la construcción de un centro de servicio para la reparación y mantenimiento de drones “en un futuro próximo”. Este contrato es posible gracias al firmado entre Ucrania y Turquía para colaborar en el campo de las industrias de alta tecnología, aviación y espacio, en vigor desde el 23 de enero de 2023. Según el secretario de Estado del Ministerio de Defensa de Ucrania, Kostyantyn Vashchenko, la creación de este centro “será una contribución significativa para fortalecer las capacidades de defensa de Ucrania y ayudará a acercar nuestra victoria”. Además ha añadido que reforzar sus capacidades pasa también por desarrollar su propia infraestructura, crear sus propios puestos de trabajo, capacitar al personal para que, incluso después de ganar la guerra, sigan teniendo la “oportunidad de ser lo más eficientes posible y utilizar los recursos disponibles para mantener la capacidad de defensa del estado en el nivel adecuado”.
Igualmente destacable es que mañana comenzarán a llegar los primeros obuses autopropulsados Zuzana 2 fabricados en Eslovaquia y cuya compra ha sido financiada por Dinamarca, Alemania y Noruega como parte de su asistencia militar a Ucrania. En particular, llegarán las dos primeras unidades de un total de 16.
Sobre la ayuda financiera hay que destacar que Ucrania ha recibido un préstamo de Estados Unidos por importe de 1.250 millones de dólares a través del Fondo Fiduciario de Donantes Múltiples del Banco Mundial. Esto eleva la ayuda estadounidense al presupuesto de Ucrania a 20.400 millones de dólares en fondos desde que comenzó la invasión.
Cambiando de tercio, la misión de Naciones Unidas para el monitoreo de los derechos humanos en Ucrania ha actualizado su registro de bajas civiles. Desde el 24 de febrero de 2022 hasta el 30 de julio de 2023 26.015 civiles se han visto afectados por la agresión de Rusia a Ucrania. Más detalladamente, 9.369 personas han perdido la vida, incluidos 541 niños, y 16.646 han resultado heridas, si bien se espera que las cifras reales sean “considerablemente más altas”. Es destacable que en el mes de julio tanto la cifra de fallecidos como de heridos ha disminuido en comparación con los meses de mayo y junio.
De igual modo, la Misión ha destacado especialmente que en el ataque contra el edificio residencial en Kryvyi Rih hoy 6 civiles han fallecido, mientras que 75 han resultado heridos.
Por otro lado, el Ministerio de Exteriores de Ucrania ha publicado un resumen de los daños ocasionados tras bombardear ciudades portuarias y almacenes de granos ucranianos. En total en 9 días 26 infraestructuras portuarias y 5 buques se han visto afectados, y se han destruido 180.000 toneladas de cereales.
Continuando con cuestiones humanitarias y de las de mayor importancia para Ucrania, pero también para sus socios, la Comisionada para los Derechos del Niño en Rusia, Maria Lvova-Belova ha confirmado que desde febrero de 2022 Rusia ha recibido a unos 4,8 millones de residentes en Ucrania y de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, incluidos 700.000 niños. Lvova-Belova, contra quien pende una orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) – al igual que contra el presidente Putin- precisamente por su participación en la deportación forzosa de menores, no ha dudado en afirmar que la mayoría de los niños llegaron acompañados de sus padres y familiares, y que los que quedaron sin el cuidado de sus padres han sido asignados a familias de acogida.
Según el informe emitido por la Comisionada:
“Según el documento, también llegaron a Rusia alrededor de 1.500 alumnos de instituciones para huérfanos o personas que quedaron sin el cuidado de los padres. 288 niños de la República Popular de Donetsk fueron colocados en familias de acogida de ciudadanos rusos. Los niños de la República Popular de Lugansk regresaron a sus instituciones, pero luego, 92 niños, ha pedido de las autoridades de tutela y tutela autorizadas, también fueron colocados en familias rusas. De abril a octubre del año pasado, 380 niños de las repúblicas de Donbás que quedaron sin el cuidado de sus padres fueron colocados en familias de acogida rusas de 19 regiones del país”.
Por otro lado, se indica que 52 niños con patologías graves y que residían en el orfanato de Aleshka en la región de Jersón fueron transportados temporalmente a un área segura en Crimea. Asimismo, subrayan que los padres de las regiones de Jersón y Zaporiyia (anexionadas ilegalmente por Rusia) y Járkov y otros territorios debido a la situación en el frente de batalla entre el verano y otoño de 2022 “enviaron voluntariamente a sus hijos de vacaciones, incluso para protegerlos de las hostilidades” y “fueron aceptados por sanatorios y organizaciones de recreación y salud de Crimea y la región de Krasnodar”.
Como contrapartida, según las autoridades ucranianas, 19.546 menores ucranianos han sido deportados y/o desplazados por la fuerza, y 1.037 continúan en paradero desconocido. Nótese la diferencia entre las cifras ofrecidas por Rusia y con las que cuenta Ucrania, pues si bien, algunos menores sí se habrán desplazado con sus familias a territorio ruso con el inicio de la guerra (según Naciones Unidas en su territorio hay 1.275.315 refugiados), cabe esperar que las cifras reales de niños deportados por la fuerza sean mayores.
Para concluir y como dato interesante, las autoridades ucranianas han decidido retirar la hoz y el martillo del monumento a la Madre Patria en Kiev. De este modo, estos símbolos comunistas presentes desde la finalización del monumento en 1981 han pasado a ser sustituidos por el tridente tras contar con el 85 por ciento de los votos a favor de las aproximadamente 800.000 personas que participaron en la encuesta sobre el cambio de emblema.
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